Con la presencia del Intendente Municipal, del Presidente del HCD, Franco Intelisano y de la Directora de la Sección Sexta del Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad
Sexual, Silvia Zabala, se desarrolló el acto por medio del cual se dejó oficialmente
habilitada la calle “ Sinforosa Leguizamón”, de la ciudad de Puan.
Estuvieron presentes don Manuel Pujol, Adriana Pérez y Erica Escobar, familiares de la homenajeada.
Se trata de la primera calle de Puan en rendir reconocimiento a una mujer de la cual se tiene registro hasta la actualidad, en llegar a la Comandancia Puan.
El proyecto de Ordenanza fue elevado por el Museo Municipal al HCD y fue aprobado el pasado 23 de marzo en Sesión Ordinaria Pública.
El mismo contó con la aprobación de la Comisión Asesora de Nomenclatura ad-hoc convocada para tal fin, la cual estuvo conformada por el delegado Municipal de Puan Franco Ebertz, la Coordinadora del Museo Municipal Ignacio Balvidares Téc Jorgelina Walter, en representación del Poder Ejecutivo Municipal, la Sra. Dora Beatriz Alvarez Presidente de la Comisión Cooperadora del Hospital Municipal Gobernador Ugarte, la señora Mariel Ester Avit Directora de la Escuela Nº 1 Domingo Faustino Sarmiento.
La asesora histórica del MIB, Prof. Fabiana Alvarez dio detalles de la vida de doña Sinforosa, los cuales pueden leerse en el apartado que se adjunta.
El proyecto de Ordenanza contempla la colocación de una referencia histórica frente a la vivienda que aún se conserva y donde pasó sus últimos años (calle Santamarina entre Garibaldi y 9 de Julio).
Su historia
En el museo Ignacio Balvidares de Puan, próximo a su cincuentenario, hemos iniciado un trabajo de revisión sobre la puesta museográfica en relación al tema fronteras del siglo XIX.
En el marco del trabajo iniciado, las fronteras son entendidas como espacios socialmente construidos con características y dinámicas propias; espacios porosos y permeables, que comprendían un amplio abanico de manifestaciones y que eran atravesados por hombres y mujeres, bienes y productos, influencias culturales e intercambios de información, procesos de mestizaje, cosmovisiones y transformaciones lingüísticas. (1)
En este sentido, nos encontramos en la tarea de visibilizar a las mujeres de la frontera constituida en el espacio que hoy ocupa la localidad de Puan e imponer el nombre de una de ellas a una calle de Puan, teniendo en cuenta la ausencia de nombres femeninos en las arterias de la localidad.
Según Estanislao Zeballos en la frontera vivían alrededor de dos mil mujeres. Entre ellas se encontraba Sinforosa Leguizamón. Llegó a Puan en 1876 cuando ya estaban las tropas de la división Costa Sud, al mando del Cnel. Salvador Maldonado. (2) Por tanto es la primera mujer, de la cual se tiene registro hasta la actualidad, en llegar al fuerte de Puan.
De origen mestizo, su papá era español y su mamá indígena, Sinforosa había nacido lejos de aquí, en Santiago del Estero, en 1853 (3), año en el que continuaban activos los efectos de la caída del gobierno de Juan Manuel de Rosas y era sancionaba la Constitución Nacional.
Siendo muy joven llegó con su familia a Azul. En este lugar conoció a Cipriano Catriel a quien describía como guapo y de hermosa estampa. También conoció a su conviviente, un italiano llamado Pablo Arnaldi contratado por el Gobierno para cubrir los servicios de ranchos y comidas. Con esta función llegan a Puan y, según las órdenes del ejército, les fue adjudicado un espacio para establecerse en la zona del “cerrito”, cerca de la laguna. Luego la Municipalidad les construyó una casa en un terreno ubicado entre las actuales calles Garibaldi y Santamarina. (4)
Los puanenses que la conocieron la describen como una mujer delgada, relativamente alta, que siempre vestía ropa oscura y que cubría su cabeza con un pañuelo negro que anudaba por debajo de su barbilla.
Los recuerdos de su nieto, Roberto Cabrera, nos acercan a la vida cotidiana de Sinforosa y podemos saber que solía ser contratada para la cosecha de maíz por el Sr. Pascual Botino y que al ser analfabeta y no saber manejar dinero, entregaba sus ingresos a la Sra. Zulema Vercellino para que se los administrara. En relación a los ratos de ocio, era aficionada a las danzas folclóricas y cuando sus nietos lo solicitaban, ella, pañuelo en mano, interpretaba el Pericón, El Cielito, La Huella, La Firmeza, con gracia y soltura. (5)
Vivió en Puan hasta su fallecimiento el 7 de agosto 1960, con 107 años de edad. Según el Dr. Suárez, que fue su médico a partir de 1953, tenía una salud envidiable y murió de senectud. Suárez cuenta que la conoció cuando se instaló en la casa del Dr. Cisternas, anterior médico de Sinforosa, y que al verlo exclamó “negro y feo como el doctor Cisternas, usted será mi médico hasta que muera”. (6)
Además de ser la primera mujer en Puan de la cual se tenga registro hasta hoy, Sinforosa dio pistas sobre el origen del tan discutido nombre Puan, el Dr. Suárez, muy interesado en el significado del nombre, la consultó y dice que Sinforosa lo hizo salir a la vereda y le señaló los cerros. (7)
La longevidad de Sinforosa la ubicó como testigo de grandes hechos de la historia nacional y mundial. Vivió la transformación del mapu en la llanura pampeana, el desarrollo de las dos guerras mundiales y el surgimiento de los dos grandes partidos políticos argentinos, el radicalismo y el peronismo.
En el obituario publicado en el diario El Puanense puede leerse “La extinta era una de las antiguas pobladoras de la localidad y gozaba de la general consideración de cuantos la conocieron y trataron, habiendo sido muy deplorada su desaparición.”
Notas
(1)Historia de la provincia de Buenos Aires, T. 2 De la conquista a la crisis de 1820, Cap. 5, ORTELLI SARA, La frontera y el mundo indígena pampeano, Pág. 160.
(2)CABRERA, Roberto. Texto de recuerdos de su abuela Sinforosa Leguizamón.
(3)Idem
(4)Idem
(5)Idem
(6)SUAREZ, FLORENTINO, textos varios
(7)Idem
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