Por José Luis Ibaldi - Mañanas de Campo
Iniciar un nuevo año siempre es un desafío. No se trata sólo de un año que se va y de otro que viene. El año que dejamos atrás no es para desechar sino para tomarlo como referencia, como hito en nuestras vidas por la pandemia de Covid-19, que no ha cesado aún, y todas sus implicancias en nuestra salud física y espiritual, pero también en nuestra salud económica, financiera y social.
Seguramente, de la experiencia del año pasado hemos aprendido lecciones, y muchos de ustedes atesorarán para contar a sus futuros hijos o nietos. Como lo señalara en su famosa revista el historidor Félix Luna: “Todo es historia”.
Y ahora hay que mirar para adelante, hacia el horizonte que se abre en este 2021, lleno de incertidumbre por el bichito que aún nos acecha. No se olviden que vino por todos… Y por eso hay que seguir cuidándonos desde lo sanitario, haciendo una vida de prevención, y tratando de que políticos y sindicalistas no hagan lo saben muy bien hacer: hundirnos cada día un poquito más, para salvarse ellos.
Los ciudadanos de a pie tenemos el desafío de ponerle contenido al contexto donde nos desenvolvemos, para cambiarlo. Y en ese camino juega un partido muy importante la participación, sobre todo en un año electoral de medio tiempo.
Participar no significa poner el voto en la urna, sino movilizarnos, tener objetivos, diseñar mecanismos que nos permitan alcanzarlos, ejercer el control de esos objetivos, para ver si efectivamente llegamos a lo que nos habíamos planteado. Dialogar mucho, saber escuchar.
Tenemos que ser ciudadanos protagonistas de nuestro tiempo y mejores constructores de la República. Tenemos que estar dispuestos a vivir ese protagonismo y no ser simples espectadores. Aprendamos a identificar a los políticos honestos, comprometidos con la sociedad y no con ellos mismos.
En este 2021, en nuestras Mañanas de Campo siempre van a encontrar un oído para escucharlos y nuestra palabra para transmitir a propios y extraños el mensaje del campo de nuestra región y el de nivel nacional. Por supuesto, que nunca escucharán un mensaje sumiso al poder de turno. Habrá opinión. Fuerte, seguramente, como estamos acostumbrados los mellizos acuarianos Bodanza e Ibaldi, pero siempre con la premisa de que debemos ser tábanos que aguijonean la realidad, para hacer pensar, para hacer reflexionar.
Desde mi retiro cordobés, por todo este mes de enero, les deseo Salud, Paz y Trabajo, algo que aún es incierto, pero alentemos la esperanza. ¡Los abrazo fuertemente!!!
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