Distinciones “Don Ignacio Balvidares”

A partir de una iniciativa del Museo Ignacio Balvidares y de la Jefatura de  Ceremonial

en un proyecto que dio inicio en el 2022 en el marco del 150°  aniversario de

la publicación de la primera parte del Martín Fierro de José  Hernández,

hoy se entregan las distinciones “Don Ignacio Balvidares”.

El objetivo de la misma,  es homenajear la  trayectoria y trascendencia de instituciones, personas, colectivos que  cultiven y sean custodios de las costumbres y tradiciones gauchescas,  como así también de las tareas rurales en el Distrito.

 

Se determinó nombrar a la distinción de esta forma ya que Don Ignacio  Balvidares fundó el Centro Criollo local e impulsó el Monumento al Gaucho que se erige aquí mismo.

 

El Museo Municipal de Puan lleva su nombre porque surgió a partir de la colección que el señor Balvidares donó al Municipio en el  año 1973.

 

La selección se realiza a través de jurados integrados por delegados de cada localidad, instituciones educativas y culturales y aquellas relacionadas con el agro.

A continuación mencionamos a los homenajeados:

 

JOSÉ BARRIONUEVO (PUAN)

 

Si bien no es oriundo de estas tierras, ya hace más de 20 años que está  con nosotros mostrándonos sus conocimientos en trabajos  agropecuarios.

 

Miembro de la agrupación “Campamento en Puan”, que realizan  eventos de Destreza, jineteada y demás costumbres gauchas que los  representa.

 

Jinete, amansador de caballos, entablador de tropillas y sobretodo  reconocido compañero de actividades afines a su historia.

 

Hoy en día, se encuentra trabajando en una Cabaña de cría de toros, de  reconocida trayectoria, recibiendo las mayores condecoraciones en  diferentes puntos del país. 

 

El CORDOBÉS, como todos lo conocemos, es una imagen viva de  quienes en épocas pasadas, trabajaron nuestras tierras para hacer un  gran país.

 

Es por ello que hoy queremos hacerle esta distinción y decirle GRACIAS  CORDOBÉS por llevar y mantener viva nuestra historia.

 

Carlos "Pereyra" Murias (San Germán)

 

Cada pueblo tiene su esencia, eso que lo hace único y especial, hoy la  localidad de San Germán quiere reconocerlo por hacer que nuestras raíces estén más arraigadas que nunca. 

 

Empezó de chico, al tranco, bayo, zaino o alazán todos le gustaban, la  vida lo fue llevando y trotando en un gateado hizo amigos, amores y  conoció el polo, que fue, según el "el tren que pasa una vez".

Hoy entendemos que alguien tenía que hacer de San Germán fuera  "TIERRA DE CRIOLLOS", ese lugar que fue bandera en cada evento. 

 

Carlos domador por excelencia y muy bueno para el lazo, el hombre al  que la vida lo pialó al corazón de su familia, el hombre que hoy, de la  mano de sus nietos, vuelve andar al tranco, mostrándoles, ...el  valor de las raíces.

 

Héctor Enrique Martín "El Chiche" (Bordenave)

 

El más pequeño de cuatro hermanos. Nacido en este mismo pueblo, un 4 de Octubre de 1939... hoy 85 años.  Hijo de una madre inmigrante, mujer fuerte, que le ha puesto el pecho a  situaciones difíciles que tocaron vivir en aquellas épocas. Un papá  inquieto, salidor y muy sociable, que siempre ponía la cuota de humor a  las distintas situaciones. Así fue transcurriendo toda su infancia, ya  apodado de muy chico, "El Chiche".

 

Días largos de trabajo en el campo con sus hermanos. Cuenta que la tierra  se trabajaba (arar, sembrar, cosechar) con caballos, eran 30 o 40 los cuales  él era encargado, con poca edad, de alimentar y dar agua cuando se  paraba a la hora del almuerzo y a descansar. Con el paso del tiempo  vinieron las maquinarias que simplificaron mucho las tareas del campo.

 

Luego se casó con Margarita y tuvieron tres hijas. Siempre formó parte de  las distintas comisiones de las instituciones del pueblo, disfrutó mucho de  realizar esta actividad. Con sus 85 años aún sigue trabajando en el campo,  sus manos hablan de ello. Manos marcadas y cuerpo esbelto, trabajan un  poco más lento. Hombre de pocas palabras, pero de mucho valor en  ellas, "la palabra vale más que un papel..." Hombre que sostiene la  mirada, fiel a sus amigos y creencias, siempre dispuesto a hacer un asado  para recibirlos en su casa.

Oscar Emilio Sequeira (Villa Iris)

 

Nacido en General La Madrid el 7/5/1946. Vivió en las Martinetas  hasta su adolescencia.

Hijo de doña Margarita Cipriana González y don Eulogio Sequeira. Séptimo hijo de una familia numerosa, doce hermanos, cinco mujeres y siete  varones. 

 

Comenzó trabajando en su zona hasta los años 84 que se vinieron a vivir a  la zona de Villa Iris siempre en la zona rural. 

 

En el año 70 se casó con Eva Noemí Barrionuevo también de las  Martinetas. Con quien tuvo cuatro hijos. Tres varones y una mujer. Ahora  ya es abuelo y bisabuelo.

 

Siempre de muy pequeño vistió pilchas gauchas y se dedicó con mucha  pasión a la mansedumbre de caballos como así a todos los trabajos de campo en lo que ello conlleva inculcándole, sin querer, la misma pasión a  sus hijos.

 

Se jubiló en el mismo lugar de llegada a Villa Iris, con la misma firma que  vino de sus pagos, la familia Biurrarena.

 

Hoy en la actualidad vive en la localidad de Villa Iris y sigue teniendo algún  caballo para llevar a cabo su hobby.

 

Siempre, mientras tuvo hijos en edad escolar, participó de las comisiones y  cooperadoras de las escuelas de campo colaborando y siendo parte de  eventos, actos y arreglos de los establecimientos.

También, desde hace ya varios años, está vinculado con mucha  participación en el Centro Tradicionalista El Jagüel, integrando la  comisión, participando de destrezas, desfiles, jineteadas y las diferentes  actividades de dicho centro, siempre acompañado de su familia.

 

Tambo "Dayegui" de la Familia Egert (Darregueira )

 

El tambo DaYeGui nació hace 50 años como un sueño de Rodolfo Egert, quien, con esfuerzo y dedicación, comenzó a construir este proyecto con  sus propias manos y con la ayuda de su familia. Lo que en sus comienzos  fue un pequeño emprendimiento, con el paso del tiempo se ha  transformado en una empresa que no solo produce leche de gran calidad,  sino que también ha sabido ganarse el respeto y el cariño de nuestra  comunidad.

 

Rodolfo, junto a sus hijos, trabajó incansablemente para hacer de DaYeGui un ejemplo de esfuerzo, perseverancia y responsabilidad social.  Su colaboración constante en iniciativas locales, su apoyo en momentos  de necesidad y su firme compromiso con el desarrollo de Darregueira han  hecho de este tambo una parte esencial de nuestra identidad.

 

Por ello, honramos a DaYeGui y a la familia Egert por su gran  colaboración con nuestra comunidad y por ser una inspiración para todos  nosotros. Gracias por ser un ejemplo de trabajo en equipo, de valores y de  amor por Darregueira.

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