Por Carlos Bodanza - Mañanas de Campo
“La Carne está barata” dicen las voces de pasillo, mientras el kilo de asado, pocas veces de máxima calidad supera los 7000$, de ahí, podes bajar en muchos casos a 5000$ y hasta alguna oferta de vaca o algún remanente de exportación, tal vez salga hasta un poco menos en algún supermercado que con cadena completa, se da el lujo de seguir ganando más plata que el resto.
Lo cierto es que el valor de la hacienda en pie sigue “clavado” prácticamente desde no menos de 5-6 meses atrás, lo que para muchos en realidad es algo importante porque en definitiva la carne siendo uno de los productos más sensibles de la canasta familiar, permite el “anclaje” de los precios y la inflación, más allá de la luz, del combustible, de los servicios, carne quieta, inflación quieta, es casi un equivalente.
Los mostradores hablan, pero nunca sabemos hasta donde. Si está el dato que bajamos de 52 a 46 kg, cuestión que nos hace ver que el problema no es el precio de la carne cuando se dice que “la carne está barata”, ya que probablemente existe “un piso” en donde por más barata que esté, el consumo no caerá ni aumentará, mientras la economía esté en quiebra para muchos.
En todo esto, hay un productor ganadero que tuvo que luchar con la sequía, con la inflación, con la exportación en caída, con los frigoríficos exportadores, que siempre son quienes ponen los precios sin saberse demasiado cuando es correcto y cuando no, por eso la caída en el consumo, el planchazo de los valores y todo lo demás, nada a ponerle el pecho a las balas, es libre comercio y son las reglas. Solo como dato, si se le aplica la inflación a la hacienda en pie, deberíamos hablar de 2800$-3000$ el kilo de novillo de consumo, atrasado dije?
Para muchos el Presidente de la Nación, ignora al sector agropecuario, de hecho esta semana tras visitar la Pista de Palermo –tercera vez en el año- en el Centenario de la Hereford, algún medio reclamó la falta de anuncios y la mansedumbre del sector al respecto. Nunca más en desacuerdo que con esas definiciones: si hay algo que el campo necesita, es que este gobierno, el que siga y el que venga dentro de 50 años, no anuncie absolutamente nada, pero si que haga lo que practica el actual: seguir sacando trabas burocráticas, y correrse del medio, es la mejor medida que se puede adoptar para quienes cada día, producen pensando en la preñez de una vaca, que tendrá un ternero que dará carne, dentro de los próximos 3 años y para eso necesita la previsibilidad, de que cuanto menos toquen, mejor. Y tal vez, algún desmemoriado, no recuerda que en la Rural de Palermo, se sacaron al menos, las retenciones a las exportaciones de la Vaca, situación que hasta hubo que soportar quejas, de los frigoríficos dueños del mayor egoísmo comercial, jamás visto.
La Carne está barata y no hay nada para hacer, cuando el clima se mete al medio, cuando China levanta la pata, cuando el mercado interno está en quiebra y cuando así, se dio el negocio. Nadie tiene que hacer nada, porque justamente, esa falta de medidas, es la que permite que cada uno, haga sus números y se maneje, pero si decir que cuando esta historia pegue la vuelta –tal vez no falte tanto- tampoco hagan nada, porque hoy quizás tocó ganar poco o empatar y por es necesario que cuando la carne ya no esté tan barata, también el gobierno, no haga ni anuncie nada.
Alguna vez tendremos que aprender, que más allá de las suspicacias de algún sector frigorífico, de supermercados y otros, la salud de la ganadería, necesita la falta absoluta de intervención estatal, sin dudas, la mejor medida que cualquier gobierno pueda adoptar. Oferta y demanda, el mayor regulador de precios, del mercado más genuino que aún tiene la Argentina.
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