Si el supiera

Por Carlos Bodanza - Mañanas de Campo

Qué bueno sería que esto ocurra, que por un momento se entere de lo que está pasando y sobre todas las cosas, de lo que podría pasar. Todo realmente sería diferente, muchos de los sueños de los Argentinos, podrían concretarse, muchas realidades llegarían a destino y al fin, podríamos alcanzar ese ansiado despegue que tanto hemos anhelado.

 

Es un momento clave, ojalá el lo supiera. Hay buena humedad, los conocimientos si bien es cierto que año tras año se sigue aprendiendo, el nivel cultural a la hora de la siembra, es sorprendente. No habría “farmer “ en el mundo que no pueda envidiar el rodaje de nuestros agricultores, muchos de ellos darían lo que fuera, por sentarse en una matera y llenarlos de preguntas. Convencional, directa, malezas, cura semillas y hasta ya con este, tres años de conocimientos en un evento que el mundo está empezando a conocer, como esto del Hb4, trigo con tolerancia a la sequía, vaya casualidad un cultivo del semiárido que además está preparado para este clima. Bueno, acá ya saben de que se trata y más de uno, puede dar clases con su experiencia. Pero el tal vez, no lo sepa.

 

Es cierto, todos desconfían y saben que más allá del mercado intervenido, de no cobrar en dólares, de tener retenciones, de seguir con la “cantinela” de la mesa de los Argentinos – un clásico discurso para la gilada que nada entiende de trigo, de mercados, de harina, de pan y de nada – a pesar de eso, ellos son capaces de ir al frente pase lo que pase. Porque el mundo está en guerra y si bien ellos nada tienen que ver, no aprovechar las circunstancias, es directamente propio de un inútil, solamente la inutilidad de un funcionario o de un político, podría ir en contra de que en la Argentina hoy, se siembren las macetas de los balcones con trigo para vendérselo al mundo. Ojalá, el lo supiera.

 

Porque hay muchos pensando que los cultivos en el mundo están disparados, la carne sin dudas es el alimento número uno de cualquier país en desarrollo. Y para tener carne, no solo hay que tener vacas, sino también superficie. Y para ello, hay que saber criar, hay que saber de genética y nutrición, hay que estar preparados para que un vientre, se transforme en una bomba expansiva de terneros en los próximos años. Y todos ellos lo saben, todos entienden que no existe hoy mejor inversión, que apostar a la proteína que el mundo no puede producir, y nosotros si. Pero claro, el no lo sabe y los nuestros si.

 

Por eso en estos días, todos miran el negocio, todos invierten en terneros, se paguen lo que se paguen, muchos miran a China, porque allí están los platos con comida más grande del mundo, y ellos pagan, y ellos quieren más, pero el no lo sabe. Por eso, más allá de las muchas vacas que se venden todos retienen, todos guardan futuras madres, porque ya es el momento y más temprano que tarde, nada para el tren Chino.

 

Y por ello sembraron y sembrarán maíz, y peor aún, harán soja, por más que le digan yuyo, le meterán al girasol, porque Rusia y Ucrania no pueden y aquí, crece y se cosecha y vale, y vale mucho, aunque el no lo sepa.

 

Por todo esto, hay una única condena: este país va a salir adelante con el campo, con sus siembras, con sus cosechas, con su vacas, con sus terneros aunque el no lo sepa. Por eso, como el no lo sabe, no lo quiere ver, o no le interesa, con Alberto o si Dios quiere en poco más de un año, sin el, Argentina y el campo estarán irremediablemente condenados al éxito. Aunque el, Cristina, Máximo y toda su comparsa, digan que no lo saben.

Escribir comentario

Comentarios: 0