Por Carlos Bodanza - Mañanas de Campo
Reventar o resistir, no existe otra manera de sobrellevar el día a día, cuando todo en este país, es un verdadero aquelarre. Es tomar una semana al azar, porque en definitiva da lo mismo, podría ser esta o cualquiera, para muestra siempre basta un botón.
Quienes siguen de cerca las actuaciones del “tren fantasma” –nunca un nombre mejor puesto- no dejan de asombrarse ni ellos mismos, lo que la magia del “permanecer” es capaz de lograr: ver a Felipe Solá junto a Cristina, es propio de un capítulo de Walking dead (los caminantes muertos, conocidos como zoombies), en donde los vivos y los muertos, se escrachan a sí mismos en una selfie, orgullosos de ser capaces de juntar, algo poco menos que poco creíble. Por el resto nada nuevo bajo el sol, Massa repudiado en las calles por propios y rivales, Margarita en la denuncia eterna, los Fernández siendo los Fernández y el resto sumados a esta verdadera fiesta de carnaval político que vivimos y que quedará como tal, comparsas de cartón, sin contenido alguno.
Paréntesis para Lavagna, acusado como el padre de las retenciones, justamente señalado por quienes hoy ponen retenciones, pero como no son las anteriores y estas son otras, es más culpable que los de hoy, por ponerlas antes. Turno urgente en el psicólogo, porque por ahora no logro entender del todo, cuál sería la referencia. Y a lo sumo, si antes estuvo con Néstor, salvo el actual presidente, todos estuvieron con Néstor, porque en definitiva, todos terminan con todos y todos con ninguno. No quedó claro? Bueno, esa es la idea.
Baradel representando a los docentes, que una vez más, dueños de los más llanos de los cerebros de la República, ingeniosamente, comienzan otro paro en un fin de semana largo, imitando al perro que se sigue la cola, repitiendo una y otra vez a sus propios dirigentes, ideas, protestas y por supuesto, resultados.
Macri, siendo Macri, con un discurso que realmente conmovió por sus palabras, por sus proyectos, por sus logros, pero que claramente debió realizarlo en otro país, porque en el que vivimos seguramente no se refirió, hasta ahora no pude entender si realmente hablaba de la Argentina o algún otro país que el solo soñó. Este claramente no lo es, o al menos para los de “ a pie”, para el obrero que en un video le pedía por favor que haga algo, sincero, sin enojos, pero rogándole que en algún momento le toque a los laburantes, no a los piqueteros, no a los subsidiados, simplemente a nosotros, a vos, a mi, al campo, si, al campo que hasta ahora, salvo el simulacro inicial de quita de retenciones, no hubo una sola a favor. A esos mismos que se les quitó el crédito, a los que ya no sabemos que número de tarifazo de luz o combustible vivimos, mientras que una vez más por ejemplo esta semana, se benefició a las empresas de peaje, permitiéndoles que no levanten más las barreras en caso de embotellamientos. A ellos siempre les toca, siempre a los mismos, pero se ve que nosotros, aún no nos toca. Y quiero lo sepan, aparentemente, no nos va a tocar.
Por eso más allá de sumarme al total repudio de los orangutanes que van al congreso y que dicen ser nuestros representantes o vaya a saber de quién, la verdad me siento huérfano. Un completo y total huérfano político. Desde hoy me declaro en rebeldía contra todos ustedes, del primero al último, por eso por ahora me declaro cerrado con aviso, de todos, de absolutamente todos ustedes señores políticos, estoy harto. Lo que sea que sigan haciendo, háganlo sin mí, porque esté yo o no, lo seguirán haciendo.
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