Las inundaciones que sufre buena parte de la pampa húmeda afectan casi un tercio de la producción agropecuaria: concretamente, el 25% de la agricultura y el 26% del ganado vacuno del país. Además, en el caso particular de la provincia de Buenos Aires, el 60% de la producción lechera está hoy en las regiones inundadas o anegadas, al igual que un porcentaje similar del rodeo vacuno.
Los datos se desprenden de un trabajo que acaba de terminar la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa a partir de un relevamiento de imágenes satelitales de la última semana y con datos de producción.
A propósito, el vicepresidente de Carbap, Jorge Grimberg consideró en LA BRÚJULA 24 FM 93.1 que lo que se está viviendo "es un desastre"; al tiempo que añadió: "El tema del agua viene de larga data y, cuando se seca, nadie se ocupa. No es un tema de la provincia de Buenos Aires, es integral. En Córdoba cae agua y la manda para La Pampa y de ahí llega a Buenos Aires".
"Estamos en una situación similar a lo que ocurrió tiempo atrás en Epecuén. Tiene que existir un plan integral y nacional para que cuando ocurren estas cosas se evacúe el agua. En Australia cuando llueve mucho el agua va a reservorios para épocas de sequía. Es algo posible de concretar. Acá se tira mucha agua dulce al mar sin aprovechar, incluso sin haber inundaciones", resaltó Grimberg en el programa "Bahía Hoy".
Y lamentó: "Se han perdido cosechas que no se pueden sembrar. Esto ocurrió con el maíz, el trigo y la cebada. Las napas están muy arriba. América está inundada, lo propio ocurre con Rivadavia, Trenque Lauquen y Saliqueló. Existen zonas planas donde no corre el agua".
"Con el ganado lo que hay que saber es que las vacas se pueden sacar porque 'saben nadar'. El problema es con las preñadas y allí el problema son los terneros. Lo que uno debe es ser previsor para retirarlas antes de las tormentas", expuso el dirigente de la Confederación.
Respecto a las acciones concretas que vienen llevando para mitigar el impacto de las inundaciones, Grimberg detalló: "Ante el Comité de Cuenta se pidió la ayuda de técnicos holandeses que proyectan un plan muy importante. No es algo de un año para el otro pero hay que encararlo. Los trabajos hay que hacerlos cuando no llueve".
"Los precios de los comodities son internacionales pero si Argentina disminuye la superficie de siembra pueden influir. Por ahora no hay faltante de carne pero sí hay una afectación importante que no se soluciona con un subsidio. Se debe trabajar en una ley de emergencia provincial y nacional", concluyó.
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